Se trata del conjunto de ejercicios funcionales en los que o los pies o las manos se sostienen al equipo de suspensión que consiste en un arnés sujeto a un punto de anclaje (un árbol, una puerta, ,etc) ajustable y no elástico con una o dos asas unidas por una cinta, mientras la otra parte del cuerpo está en contacto con el suelo.
El punto de partida es la autocarga, trabajar con el peso del cuerpo y la resistència a la gravedad exigiendo un reequilibrio constante. Así, a parte del propio ejercicio, se activará la región lumbo-pelvica, clave en el cuerpo humano como punto de estabilización corporal para cualquier tipo de movimiento facilitando un control corporal, postural y equilibrio en cualquier tipo de tarea. Todo ello permite el desarrollo de la fuerza, resistencia, coordinación, flexibilidad, potencia y estabilidad, fortaleciendo abdominales o, de manera específica, espalda, hombros, pecho, cadera y piernas.
A grandes rasgos:
- Accedes a movimientos que implican a grandes cadenas musculares
- Permite un incremento notable de la fuerza, equilibrio, resistencia muscular y tonificación.
- Con una buena rutina interválica puede ser empleado como ejercicio cardiovascular.
- Con una intensidad moderada o alta y a buen ritmo se desarrolla fuerza y resistencia funcional mientras se queman calorías.
- Modulación de intensidades en función del peso, agarres y tipos de ejercicios
- Facilita un entrenamiento global del cuerpo